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Febrero - marzo 2006
En portada:
En una sala de billares, Manila, 2001, fotografía de Miguel Trillo.
PVP: 3,00€
EDUCACIÓN
Dosier los diez años de doce notas:
5 El secreto es la pasión, Elisa Roche.
8 Música y medios, unas relaciones resbaladizas, Juan Ángel Vela del Campo.
10 Escuelas de Música: pasado, presente y futuro, Marisa Pérez.
11 Algunas impresiones, José Luis Nieto.
12 La travesía europea de una estudiante e oboe, Pilar Fontalba.
14 Enseñanza superior, conservatorios superiores, Almudena Cano.
16 Doce puntos de una década de música en Secundaria, Isabel Domínguez-Pa- lacios.
18 Luthería: nuevos niveles de calidad y competencia, Ramón Pinto.
19 Las Jóvenes Orquestas, un pulso a la vida musical de nuestros país, José Luis Turina.
20 El diletantismo, Luis Gago.
OPINIÓN
22 En clave de estética. Tiempo, José Luis Nieto.
INSTRUMENTOS
23 El museo Victor Salvi o el triunfo del amor, Anna Pasetti.
27 Asignaturas elementales para músicos y luthieres, Jordi Pinto.
30 Salón de Madrid y Musicora.
MÚSICA Y MEDICINA
Problemas en la embocadura (5): El sobreuso muscular, Jaume Rosset i Llobet.
PUBLICACIONES
>Libros, escaparate editorial.
38 Partituras, año Mozart, Gerardo Fernández.
42 Grabaciones: De España vengo, de España soy..., Jaime Arroyo Moya.
El hombre del sombrero, David Torres.
ACTUALIDAD
57 Agenda de Madrid.
62 Agenda Nacional.
PEQUEÑAS NOTAS
El Teatre Nacional de Catalunya, temporada infantil, Xavier Villalvilla.
67 Aires gallegos temporada 2005-06, Amalia Moreiras.
68 Al encuentro de un nuevo público, Virginia Valero.
69 Agenda conciertos en familia.
CUADERNO DE NOTAS
(En páginas centrales)
1 En Portada. Las escuelas vascas reúnen fuerzas, Guadalupe Caballero.
4 IAEM: un programa de doctorado en Educación Musical, Gabriel Rusinek.
6 Actualidad.
8 Cursos y Concursos.
14 Leila, No me lo cuentes, cántamelo, Elena Montaña.
15 Distribución y pequeños anuncios..3
EDITORIAL
Doce Notas alcanza con este número un doble aniversario: su décimo año de existencia y su número 50. Ambos son suficientemente relevantes como para motivar un año especial para nuestra publicación, un año que queremos puntuar con una serie de actos que se van a prolongar a lo largo de los doce meses. Hemos querido recordar con un buen puñado de amigos lo que ha significado esta década en el ámbito de la música española, y no sólo por lo que representa para nosotros. Desde 1996 hasta aquí, por ejemplo, la educación musical –una de nuestras grandes obsesiones– se ha transformado, mal que bien, gracias, entre otras cosas, a la reforma educativa asociada a la LOGSE que ha introducido la enseñanza de la música en el sistema educativo por primera vez en la historia del país. Una reforma que dio sus primeros pasos casi a la vez que lo hacía nuestra revista y cuya defensa (sin perjuicio de la crítica) se ha convertido en bandera y casi misión histórica de Doce Notas.
Pero no sólo ha sido eso nuestra ya dilatada aventura. Nuestra vocación de servicio al sector profesional de la música, al estudiante, profesor, artesano, etc., nos ha llevado a ser pioneros en no pocas secciones, como es el caso de nuestra aportación a la medicina en la música, la luthería, la sección de partituras, la crítica de espectáculos infantiles o la atención a los centros por medio de nuestro Cuaderno de Notas en páginas centrales. Tampoco los 50 números publicados agotan lo que han sido estos diez años. El reciente número 16 de nuestra revista semestral Doce Notas Preliminares (dedicado a los ensembles de música contemporánea), aumenta la nómina de nuestras publicaciones muy por encima del medio centenar que ahora celebramos. A ello se le añade la Guía de Conservatorios y Escuelas de Música en España, que desde su tercera edición ha pasado a ser también de Danza, o las cuatro convocatorias de la Fiesta de la Música del 21 de junio que Doce Notas ha propiciado y coordinado en Madrid.
Ni que decir tiene que toda esta actividad, nacida sin más apoyo financiero que la fuerza de nuestro trabajo, el entusiasmo y la complicidad de no pocos actores del sector, ha sido posible gracias a colaboraciones que se han transformado en compañerismo, cuando no en franca amistad.
Es el caso de anunciantes cómplices de la primera hora y fieles hasta la actual, ellos soportaron casi en exclusiva los recursos materiales de la revista cuando ésta era gratuita; ellos han mantenido un flujo de información hacia nosotros, y a través nuestro, hacia el público en general que no dudamos en considerar determinante de que el ambiente musical actual sea mejor que el que encontró nuestro nacimiento.
Y aunque todos nuestros anunciantes merecen nuestro agradecimiento, queremos simbolizarlo en algunos nombres prácticamente fundacionales, como Polimúsica, Hazen, Mundimúsica Garijo, Bilbao Trading, Yamaha, A tocar, Aula de Músicas, Juan Álvarez, Call&play, Manuel Contreras, Francisco González, Pedro Llopis, Casa Parramón, Piano Tech´s, Rincón Musical…, en fin, una saga que retrata la música española con sus esfuerzos, anhelos y logros de una manera mucho más emocionante de lo que denotan sus marcas.
Ellos, y muchos como ellos, son la historia de nuestra música en ese apartado sin el cual ésta no existiría: la infraestructura; y también ellos son la historia de nuestra revista. Para nosotros ha sido un honor y una indescriptible satisfacción haber podido reflejarlo. Nuestros diez primeros años son, también, su orgullo.
Con ellos y con todos nuestros amigos y lectores decimos: “viva la música” (frase que, según cuentan, fue la última del malogrado compositor Antonio José antes de caer fusilado en 1936), y no es una frase baladí en tiempos de imperialismo de lo visual y de cultura basura. Y que otro genio como Mozart, también de aniversario, nos ampare.
Por otra parte, Doce Notas redondea con este número su precio a la modesta cifra de 3 euros que no es imputable a satisfacción alguna por nuestro aniversario; sólo lo es a los prosaicos datos de la subida del coste de la vida que a nada ni a nadie perdonan. Dado el esfuerzo desarrollado por Doce Notas y lo austero de nuestros precios, estamos seguros de contar con la comprensión de todos.